María tenía un sueño. Después de 10 años trabajando para otros, decidió abrir su propia boutique. Los primeros meses fueron emocionantes: clientes nuevos, ventas crecientes, la sensación de estar construyendo algo propio.
Pero al segundo año, algo cambió. Las ventas se estancaron. Los costos aumentaron. Los clientes dejaron de regresar. María trabajaba 12 horas al día, pero los números no cuadraban.
¿Te suena familiar?
María no tenía un problema de producto o de mercado. Tenía un problema de estrategia y ejecución. Como el 73% de emprendedores que fracasan, no por falta de pasión, sino por falta de una guía experta.
Trabajas más horas, pero los resultados no mejoran. Sientes que corres en una rueda de hámster.
Unos meses hay dinero, otros no. No sabes predecir tus ingresos ni controlar tus gastos.
Tomas decisiones sobre la marcha. No tienes un plan definido hacia dónde quieres llegar.
Vives en modo crisis. Cada día trae un problema nuevo que resolver urgentemente.
Consigues clientes nuevos, pero no logras fidelizarlos. Tu negocio depende constantemente de encontrar nuevos compradores.
Haces todo manual, pierdes tiempo en tareas repetitivas y sientes que podrías ser mucho más productivo.
Si no quedas completamente satisfecho con el resultado de nuestros servicios, trabajaremos contigo para realizar los ajustes necesarios hasta que el proyecto cumpla con tus expectativas o te devolvemos tu dinero*
Realizamos una radiografía completa de tu negocio. Identificamos exactamente dónde están las fugas de dinero, tiempo y oportunidades.
Diseñamos un plan de crecimiento específico para tu negocio, tu industria y tus objetivos. No usamos fórmulas genéricas.
Aplicamos metodologías ágiles y tecnología avanzada para optimizar tus procesos y multiplicar tu eficiencia.
Como tú Growth Partner, te acompañamos a largo plazo. Medimos, ajustamos y optimizamos constantemente para asegurar tu éxito sostenible.